La caza del lobo en Rusia

El hábitat del lobo abarca un gran territorio desde la frontera oeste de Rusia hasta las orillas del Océano Pacífico, y desde la tundra ártica hasta las estepas de Kazajstán y Mongolia. Es el animal de caza mayor más extendido en Rusia. La población de lobos ha permanecido estable durante años, y en algunas zonas se ha incrementado, mermando la caza y el ganado.

Los lobos en Rusia pueden ser mucho más agresivos con los humanos que los norteamericanos, se han documentado varios casos de ataques a personas. Los ejemplares mayores, hallados en las tundras del noreste, pueden llegar a medir 2 metros desde la nariz a la punta de la cola, y pesar 100 Kg.

La caza de este animal, inteligente, cauteloso, y con gran capacidad de adaptación, es muy difícil. Muchos trofeos son fruto de encuentros fortuitos. Para las cacerías organizadas de lobos se emplea la llamada y el cebo. En las zonas donde la población de lobos se ha disparado se pueden utilizar helicópteros o motos de nieve. Pero la cacería de lobo más emocionante es la que se realiza en la zona europea de Rusia, siguiendo una tradición no muy conocida fuera de sus fronteras. Cuando se encuentra una manada, se rodea con una cuerda se entre 3 y 5 Km. de longitud, de donde cuelgan pequeños trozos de tela, generalmente rojos, denominados banderas. Gracias a las banderas el cerco es muy visible en el paisaje nevado. El olor humano que desprende la tela durante varios días hace que los lobos tiendan a quedarse dentro del cerco. Cuando los cazadores llegan al cercado, la caza comienza inmediatamente. La preparación requiere andar largas distancias, pero el ritmo de caza una vez comienza es muy rápido, suelen bastar cuatro o cinco días.

La temporada de caza abarca todo el año, pero la mejor época es enero y febrero. Las batidas de lobos de enero se combinan con las cacerías en coche de jabalí.